Se trata este de un recurso muy habitual para niños. Consiste en un tablero, normalmente blanco, lleno de agujeros, como si fuera un colador plano en el que se insertan unos “pinchos” de colores y se pueden crear figuras geométricas. Estoy segura de que todos alguna vez habéis jugado con algo similar.

He empezado a trabajar con esto hace relativamente poco y me lamento porque me parece una herramienta estupenda. Incluso si valoro que las capacidades de mi madre no le permiten crear figuras geométricas como las plantillas que suelen venir con el material u otras que se le pueden proponer, ya que se trata de un instrumento que permite dar rienda suelta a la creatividad, todavía se pueden trabajar diversos aspectos importantes.

Objetivos
  • Desarrollar la motricidad fina.
  • Trabajar el concepto de número.
  • Mantener el nombre de los colores.
  • Ejercitar el trabajo con las formas geométricas.
RECURSOS materiales

Un set de pinchos.

Desarrollo

Antes de empezar, le pido que haga líneas de un determinado color. Si veo que no es el día, no me preocupa que sean rectas, me centro solo en el color. Otra variante si se da esta circunstancia es decirle que coloque los pinchos libremente, como quiera. Si, por el contrario, se esfuerza en que así lo sean, doy instrucciones para ello (“Más arriba, abajo, a la derecha a la izquierda”), es decir, tiene que poder entender estas instrucciones para poder colocar las fichas en el lugar correcto y, como bien sabéis, esto no siempre pasa. También le digo que las cuente.

Y, como todo es educativo hasta recoger, una vez hecho esta actividad introductoria, le pido que coloque las fichas en su sitio, es decir, que lo deshaga.

A continuación, hago pequeñas figuras con los pinchos y le pido que las repita. Cuanto más sencillas, mejor. Si se puede aumentar el nivel de dificultad, evidentemente, hay que hacerlo, pero progresivamente. Se puede preguntar qué clase de figura es (cuadrado, triángulo, círculo) y preguntar las veces que se desee acerca del color y del número de fichas.

Suelen venir con plantillas con figuras que pueden realizarse en función de sus capacidades.

recomendaciones

Lo de siempre, no hay que sobrecargar ni sentirse frustrado porque la persona no pueda repetir la figura. Se trata de una actividad que requiere mucha concentración, es fácil que se canse.

A la hora de seleccionar el tamaño de las fichas, habrá que tener en cuenta el grado de afectación de la motricidad fina, lo que viene a ser que si tu familiar no puede coger cosas pequeñas, es mejor que trabaje con pinchos más grandes. Esto es de Perogrullo pero, claro, a veces nos cuesta aceptar que hay cosas que no pueden hacer. No hay que intentar mejorar, solo conservar.